Prepararse para la vuelta al trabajo
La vuelta al trabajo o reincorporación al mundo laboral tras la baja por maternidad, suele ser un momento complicado para las madres y padres que trabajan fuera de casa.
A menudo afloran sentimientos de culpa por separarse del bebé, mezclados con cierto alivio por retomar, en parte, la vida anterior. Y, si a todo esto le sumamos las cábalas que hemos de hacer para que todo encaje a nivel familiar y profesional, las últimas semanas de baja pueden ser bastante estresantes.
Para hacer más llevadero este trance, te proponemos algunos consejos que, como siempre, deberás adaptar a tus necesidades y las de tu familia. ¡Ahí van!
No adelantes problemas
Avanzar lo mal que te vas a sentir cuando dejes a tu peque en la escuela infantil, o lo difícil que le va a resultar acostumbrarse al biberón dos meses antes de volver al trabajo, no te ayuda en nada.
Debes ser consciente de que la baja por maternidad o paternidad es limitada, pero no adelantes acontecimientos, disfruta del tiempo juntos y céntrate en buscar soluciones cuando los problemas sean reales, no antes.
Fuera culpa por la vuelta al trabajo
Asúmelo, te sentirás mal por llevar a tu bebé a la guardería, por dejarle con los abuelos, por no pedir una excedencia… El ser humano es así, pero piensa que estás haciendo todo lo que puedes con las herramientas que tienes.
Tu hijo o hija estará bien y, si no lo está, siempre puedes cambiar.
Las decisiones que tomes al principio de la baja no tienen por qué durar toda la vida, irán cambiando en función de vuestras necesidades.
Cuidado con creerte Wonder Woman
Este apartado está dirigido a todos aquellos progenitores, especialmente las madres, que al tener un bebé se ponen como objetivo llegar a todo y hacerlo bien. ¡Nada más lejos de la realidad!
¿Conoces el proverbio africano “Para criar a un niño hace falta una tribu entera”? Pues eso.
"...las cábalas que hemos de hacer para que todo encaje a nivel familiar y profesional..."
Los primeros años de vida de un niño o niña pueden ser agotadores y delegar o pedir ayuda no es nada deshonroso. Del mismo modo que cometer errores, no hay ningún atajo a la hora de criar a un bebé, ni fórmulas mágicas.
Todos los padres y madres lo hacen lo mejor que saben.
Organizaos con tiempo la vuelta al trabajo
Y decimos organizaos, porque esta no es una labor solo de la persona que disfruta de la baja, ambos progenitores pueden y deben hacerlo.
Ya que no se trata de empezar a cocinar la primera semana de baja como si no hubiera un mañana, pero sí es recomendable que organicéis algunos menús semanales, hagáis compra y congeléis, por ejemplo.
También sería bueno aprovechar que dispones de más tiempo para avanzar algunas actividades como revisiones médicas o realizar algunas compras que sabes que sí o sí tendrás que hacer.
Haz simulacros
Ya sea con los abuelos, otros familiares o amigos, prueba a dejar al bebé durante cortos periodos de tiempo con otras personas, así se irá acostumbrando a ver otras caras.
Otro buen aprendizaje es aumentar el tiempo que tu peque pasa en su hamaca bebe, así aprenderá a entretenerse por sí solo jugando a balancearse o mientras observa su entorno.
Además, con Ride&Go Baby podrás llevarle contigo por toda la casa mientras juega tranquilo.
Lactancia con calma
Algunas madres tienen mucho miedo de que sus bebés abandonen la lactancia materna, cuando ellas se incorporan al trabajo. La clave para que todo salga bien suele ser la paciencia y el tiempo.
"...no hay ningún atajo a la hora de criar a un bebé..."
Tomaos todo el que necesitéis y veréis como, tanto tú como el bebé, os acostumbráis a la nueva situación. Y, si por el motivo que sea, tenéis que pasar a la leche de fórmula, no pasa nada.
Piensa en los meses que habéis disfrutado de ese vínculo tan maravilloso y en los beneficios que ha aportado a tu bebé.
Paciencia y comprensión
Y, por último, ten siempre en mente estos dos conceptos: paciencia y comprensión. No solo de cara al bebé, sino contigo misma, con tu pareja, el entorno…
Todos los cambios son duros, sobre todo si están relacionados con la persona que más te importa en el mundo, y además estás cansada e incluso asustada.
Piensa que, con el tiempo, todo se irá acoplando e irá encontrando su lugar.